Saludos!

Bienvenidos a mi blog de literatura. Todos los personajes de los respectivos fanfics pertenecen a sus respectivos autores y yo solo los tomo prestados, a excepción de los originales creados por mi. Espero disfruten leyéndolo tanto como yo lo estoy haciendo cuando lo escribo. Por favor, no se olviden de comentar las entradas! Gracias!

sábado, 18 de diciembre de 2010

El adiós



Silencio, el viento golpeaba el cristal empañado por el aliento de Luna. El rubio se acercó y la abrazó por los hombros.
-No quiero dejarte.-Le dijo.-Prometí que te protegería y no he cumplido mi promesa, no aún.
Ella tomó suavemente las manos del monje con las suyas y la blanca piel se tiñó del carmín de sus heridas.
- Te he dicho que te vayas.-Dijo ella.- No puedo protegerte más. No puedo protegerme ni a mi misma.-
Los músculos del monje se tensaron y la apretaron contra sí. No soportaba la idea de abandonarla a su suerte en aquél lugar de locos, en aquél plan suicida.
-Morirás.-Susurró.-Sabes que morirás, Luna. ¿Por qué sigues con esto? Ven tú también. Por favor… olvida todo esto, aún podemos huir.
Ella negó ligeramente con la cabeza, se soltó y siguió mirando el oscurecido cielo de ceniza.
-No queda otra que morir.-Dijo ella y sonrió amargamente.- Si no lo hago yo nadie lo hará Cristian, solo es un intento por protegeros y espero que no sea vano.-
Él se quedó parado mirando al suelo, tal vez el reflejo del cristal hacía ver las lágrimas que derramaba el rubio o tal vez eran lágrimas de verdad.
-No te voy a hacer cambiar de opinión ¿Verdad?- Sus nudillos se tornaron blancos de la fuerza con la que apretaba sus puños.- Eres tan obstinada que a veces pareces una mula.
-Ya… Cállate.-Dijo ella agitando su mano en el aire.- Vete… Corre y huye antes de que cambie de opinión y te mate aquí mismo.-
-No lo harías.-Dijo el rubio y la tomó por los hombros para luego girarla, los ojos rojizos de la princesa brillaban.-Tu y yo sabemos que no eres capaz de matar a nadie.
-Te equivocas.-Ella torció la boca.-Mataré a quién tenga que matar si con ello logro librarme de esta maldita carga.-
-Cálmate.-Dijo el monje tomando su muñeca.- Simplemente prométeme que nos volveremos a encontrar, niña terca. Que sobrevivirás.-
Ella cerró los labios. Le miró profundamente durante unos instantes y desvió luego sus ojos.
-Lo intentaré.-Su voz se apagó.

-No quiero que me digas que lo intentarás.-El rubio frunció el ceño.-Quiero que lo hagas. No quiero que esto sea un adiós definitivo.
El cristal vibró cuando la espalda de Luna chocó contra él. Ella sonrió un poco y sus mejillas se sonrosaron.

-Lo haré.-Dijo.-Prometo que no será un adiós definitivo.

El rubio rozó sus labios con los suyos y luego se dirigió a la salida. Abrió la puerta y antes de cerrarla la miró por última vez.

-Solo un hasta luego, Luna. Lo has prometido.- Y cerró.
La joven se dejó caer, el corazón le latía tan fuerte que creía que se le iba a salir del pecho. Quería gritar y llorar. Se tocó los labios con la yema de los dedos. Esperó, quizás minutos, quizás horas, hasta que abrió la puerta y efectivamente ya no estaban allí. Se habían ido y tal vez no los volvería a ver.
-Adiós…-Murmuró para sus adentros.
----------------------------------------------------------------------------------------------
Fragmento del capitulo 129: El adiós. Clan ASDF!. Autor: Emiluna. Si quieren leer todo lo demás pueden hacerlo en esta dirección http://www.fireemblemwod.net/foro/viewtopic.php?f=15&t=3229 pág 17 para el capitulo completo.

2 comentarios:

  1. tuvo bueno, falto algo de sentimiento en una cierta parte pero nah paso piola

    ResponderEliminar
  2. Un poco por el final se pudo retocar, pero la expresion y sentimiento impuestos, me imagine a ambos muy claramente y sus reacciones y tonos, simplemente muy bien llevado, me gusto =)

    ResponderEliminar